Rugbiers, enemigo natural de la materia gris

No le tengo demasiado cariño a los rugbiers. Preferiría cepillarme los dientes con el óxido raspado del tubo de escape de un Fiat 600 antes que embarcarme en la intransigente tarea de intentar sostener una conversación interesante con una de estas personas. No voy a mentir, durante muchísimo tiempo estuve convencido de que el que tenía un problema al sentir desagrado hacia ellos era yo, es bastante reconfortante recibir la confirmación, después de tanto tiempo, de que no estoy loco.

Sólo puedo hablar de lo que he visto a la hora de tratar de entender qué provoca que una persona genere tantas ganas de vomitar gracias a su condición de ser humano a causa de estar de algún modo relacionado con algo tan supuestamente saludable y noble como es practicar un deporte.

Algunos de ustedes saben que yo estudié en escuela pública y también en privada (por eso es que en las calles me salen bien las jugadas); puedo dar fe de que si tratas de entender cómo funciona la mente de un rubgier es bastante acertado empezar tu análisis a partir de la comprensión de la situación económica y social del individuo (en palabras menos rebuscadas, una de las razones por la que los rubgiers son una basura es porque la mayoría son unos chetos de mierda).

El chetaje por si sólo no es suficiente suficiente para que una persona se degrade a tal punto de encontrar entretenimiento en agarrar a trompadas en patota, pero si es un aliciente, estas personas nacen de por sí en un entorno que les da absolutamente todo, entonces cuando crecen un poquito esa parte del cerebro que te permite distinguir tu derecho a disponer de las cosas se desarrolla completamente atrofiada. El rugbier promedio cree que porque tiene plata y por lo tanto sus papás nunca le dijeron que no a ningún capricho que haya tenido, más encima, cómo sus vidas tienden a ser tristes por falta de amor paterno y el mejor refugio que tienden a tener en su vida es el rugby, tienden a sentirse invencibles, que pueden tener cualquier mina, porque hacen deporte, son corpulentos y con eso ya es suficiente para disponer de cualquier reclamo sexual (vease la cantidad absurda de denuncias de rugbiers por agresiones sexuales, estos ocurren porque se encontraron con una palabra que forma parte de un lugar muy extraño en su vocabulario "no").

Otro problema con los rugbiers es el propio rugby. He sido testigo una y otra vez del sistemático lavado de cerebros que existe en el entorno del rugby en particular (cuando en otros colegios en los que he estado donde se juegan deportes como futbol o volleyball, la consigna siempre era "bueno vamos a jugar" inmediatamente después simplemente agarrábamos la pelota y jugábamos), a los pibes, desde muy chicos, les llenan la cabecita poco desarrollada con mierda de que en el juego hay unos valores, que todos somos familia, que somos mejores que el resto de personas que no juegan rugby, y poco a poco se va generando una cultura de "porque somos mejores hacemos siempre lo correcto" que en la cabeza de un de por sí disfuncional puberto eso solo pueden ser problemas.

Agradezco por el amor de mi vida haberme aislado del grupo de compañeros (por mucho bullying que significase) cuando me tocó ir a un colegio donde se hacía rugby, ciertamente es mejor lo que le pasa a uno que está fuera (cuando no te asesinan a golpes) que lo que ocurre dentro. Los profesores, porque la gran mayoría del tiempo son huevones que no se dan la paja de prestarle atención a lo que hacen los alumnos, constantemente estaban mirando hacia otro lado mientras entre el grupo de taraditos se hacían un montón de maldades asquerosas a modo de "iniciación".

Tan sólo imagina esta situación, tenes un pibe, que creció con todos los gustitos, que a medida que crece no hay otra cosa en su vida que hacer deporte y verse entubado, que en ese entorno que le alimentaron la cabeza diciéndole que es "su otra familia", se maltratan entre sí y lo ven como algo sano (no podes quejarte de que te humillen, incluso que de vez en cuando te toqueteen porque eso sería re de maricón y si sos maricón hay que básicamente matarte). ¿Cómo DIABLOS no va a ser caldo de cultivo para un sociópata a futuro? Para un pibe, estúpido, que no entiende que tiene de malo agarrarse a piñas 10 contra 1, ser machista, ningunear a los pobres y humillar a los demás cuando uno no puede defenderse.

Una cosa que puedo decir que sé sobre los rugbiers, es que su existencia es bastante triste, porque viven rodeados de personas todo el día (no vaya a ser que se vean en la necesidad de pensar) y esas personas a su vez los miran como pelotudos, se ningunean entre ellos, se insultan y se humillan cuando uno no está.

Recuerdo perfectamente una situación que pasó en el colegio, que estaba este grupito de imberbes reunidito en el salón, y estaba este boludo que se la agarraba siempre conmigo (demostrando dominancia, con ánimos de dar a entender que funciona masomenos igual que un simio). El pibe era gordito, capaz de ponerse a llorar si se lo recordabas. Entonces está este grupo reunidito en el salón (probablemente planeando la siguiente reunión para tocarse los pitos) cuando el gordito que me odia se levanta, creo que fue al baño o algo así, entonces, automáticamente, sus mejores amigos empezaron a desenfundar todo el repertorio de chistes de gordo que tendrían guardados para EL momento en el que ese gordo mamón, puto steven universe, elevara su gordo culo del asiento y quedaran ellos solos. Entonces entendí.

La existencia del rugbier es muy triste, sus papás no le hacen caso (salvo para pasarle sus frustraciones en el deporte mientras las mamás se culean al vecino), sus amigos le odian en secreto, es solo una broma para la mayoría de ellos porque saben que no importa. Creen que son muy inteligentes, o no es que lo crean, es que deciden vivir engañándose a sí mismos pensando que lo son, que sus amigos no le hacen a él lo que él le hace a sus amigos (boludo, 2 + 2 = 4).

No es culpa del rugbier ser pelotudo y ser una lacra, eso sería como culpar a una paloma por cagarte encima, así pasó. Sin embargo, no hay que tenerles lástima, no hay que darles ningún tipo de importancia en lo absoluto. ¿Tiene el denominador común de las personas una solución contra el daño que hacen todos los años estos sub-humanos? La verdad, es que creo que no, ellos van a seguir y seguir.

Por lo menos podemos burlarnos de ellos.

Y si algún rugbier lee esto y cree que estoy siendo demasiado rudo generalizando sobre el tema, que no todos los rugbiers son así, hay algunos que son buenas personas y ayudan a viejitas a cruzar la calle, más abajo dejo una breve recomendación de qué pueden hacer al respecto: