martes, 24 de mayo de 2022

TATTLETAIL o: Cómo hacer tu juego no tan bueno, feo y rentable

Tattletail es probablemente uno de los peores videojuegos de terror que jugué en toda mi vida.

Si lo miras en perspectiva, los videojuegos de terror son muy parecidos a las películas de terror cuando se trata de modelo de negocios y expectativas sobre el contenido. Cada año salen un chorro de películas de terror, no te voy a mentir, algunas pueden llegar a ser bastante buenas, pero en general la gran cantidad que salen de hasta debajo de las piedras se debe a que en general se hacen con poca motivación artística detrás, son productos que responden a un modelo de negocios y poco más.

¿Qué solemos esperar de una película de terror? Un grupo de protagonistas pendejos que esperan su turno durante hora y media (aproximadamente) para convertirse en sacos de jugo de tomate, asesinados por alguna cagada que es mala porque sí, tal vez en medio hayan algunas tetas porque el público objetivo son adolescentes pendejos que se hacen los malos por mirar películas de miedito con los panas o jóvenes adultos que necesitan una excusa para sacar a la novia de la casa en el famoso acto precoital. El punto es que esperamos de estas producciones casi siempre lo mismo: protagonistas pendejos, algunos sustos, un poco de gore (cuanto más barato y menos realista mejor), y tetas. Esto se traduce, casi siempre, en poco presupuesto y altas ganancias, porque estas películas no necesitan una gran taquilla para ser rentables.

Con los videojuegos pasa masomenos lo mismo. Si queres ganar unos cuantos pesos usando solo algunos conocimientos básicos de Unity, solo necesitas los siguientes elementos:

-Cámara en primera persona.

-Escenarios oscuros que obliguen a los pibes que jueguen tu juego a usar la linterna (esto también ayuda a que nadie note los paupérrimos valores de producción que dejan notar los horrendos gráficos que tendrá tu juego).

-Un monstruo,  que te grite en toda la pantalla si consigue agarrarte de las patas.

Un plus a la hora de hacer el monstruo sería que este tuviera un diseño colorido y chillón reminiscente a algún dibujo o juguete de antaño porque si algo nos enseñó Five Night's at Freddy's es que el mayor público para los juegos de terror en primera persona son nenes de 12 años que miran youtubers, y usarán la tarjeta de crédito robada de tus padres para comprar tu título por steam (te odio Poppy Playtime, apenas tengo tiempo te voy a ensartar un palo por todo el ojete).

TattleTail es uno de los más obvios y puros ejemplos que aplican este modelo de negocios que he visto. Es tan obvio, carece tan fuerte de cualquier pretensión mínimamente artística que me resulta incluso insultante. Este videojuego de terror en primera persona desarrollado con Unity (ojito que probablemente con la versión gratuita para Windows) tiene las mismas pretensiones que una papa al horno en cuanto a ejecución, su único objetivo a la hora de existir es que gastes tu dinero en él, y si lo hiciste, ya ha ganado, nos vimo en disney.

Acá manejamos a un nene al que le regalan un clon de furby satánico (es literalmente satánico sin razón) por navidad. Al parecer tanto nuestro nuevo juguete como su predecesor (el cual es llamado "mamá" y protagoniza una de las escenas más MOLESTAS que tuve la desgracia de jugar jamás) tienen vida propia por alguna razón que honestamente no vi explicada en ninguna parte de la run que hice (y la única que jamás haré) y si dicho contexto existe, no me interesa conocerlo.

Jugué este juego en vivo a través de Twitch pero no lo pude grabar porque está, francamente, optimizado con los pelos de las nalgas.

Se supone que la gran novedad en este tíutlo es que al asqueroso furby que llevamos por todos lados sin ninguna explicación hay que alimentarlo, cepillarlo, cargarle las pilas, y mantenerlo fuera de la oscuridad o sino empezará a llorar, y si hacemos ruido y mamá está cerca GAME OVER por toda la cara.

Esta mecánica, lejos de impresionar por tal despliegue majestuoso de originalidad, resulta frustrante. Encima para que la linterna no se apague hay que estarla sacudiendo de arriba a abajo para recargarla en un movimiento bastante comprometedor y francamente vergonzoso (puto juego precursor de la paja).

El juego no da miedo, es frustrante, parece que al nene que manejamos tiene ciertos problemas porque no para de hacer caso a todo lo que los pendejos furbys de la salada le dicen que haga (no hay un diálogo con nadie en todo el título, ni siquiera hay personas, no sabrían hacerlas), siempre sin opinión, sin intención alguna. En todo el juego solo hay un jumpscare (osea, UNA sola animación de muerte que te puede salir por ser un pendejo, podes llegar a verla unas 15000 veces que va a ser siempre la misma), solo un escenario, completas los días antes de que sea navidad y eso es todo, pim pum pam a tu CASA. (ah no, ya estás ahí...) Este juego está hecho con menos ganas que una paja con la pija muerta (¿viste? esa analogía salió de tanto agitar la linterna en el TattleTail).

Encima los gráficos, donde tengan algo de luz, queda en evidencia que son más feos que trabajar un feriado.

En resumen: No recomiendo que nadie en el mundo gaste su plata en este juego. COmo juego, no es divertido, como terror, no da miedo. Y el DLC también es una mierda, puro contenido reutilizado y remixeado del modo más frustrante que pudo haber sido hecho jamás por nadie.

Puto juego.


Nota: Te voy a romper el orto Poppy Playtime.

No hay comentarios:

Publicar un comentario